Esto es una emergencia.
Un millón de especies están en peligro de extinción y poblaciones enteras de todo el mundo ya están sufriendo los efectos de la crisis climática.
La ciencia dice que nos quedan poco más de 10 años para evitar los peores impactos del cambio climático, y proteger y repoblar bosques es una de las mejores armas que tenemos en la lucha contra él.
Pero marcas como Nestlé, Unilever, El Corte Inglés y DIA, que en 2010 se comprometieron a acabar con la deforestación para 2020, siguen beneficiándose de la destrucción de los bosques. Han pasado casi 10 años desde aquellas promesas y, durante este periodo, se han destruido 50 millones de hectáreas de bosques —una superficie del tamaño de España— por culpa de la producción mundial de materias primas como aceite de palma, soja o carne.
Ayer un grupo de activistas de Greenpeace irrumpieron en la cumbre del Consumer Good Forum en Canadá, para recordar a los más de 1.000 ejecutivos de estas empresas allí reunidos que faltan solo unos meses para 2020 y están muy lejos de cumplir su promesa de limpiar sus cadenas de suministro de deforestación.
Los bosques son fundamentales para el planeta. Si queremos ganar la lucha contra la crisis climática debemos actuar ahora, que todavía hay bosques que proteger.
Únete a Greenpeace para frenar a las empresas que prometen proteger el medio ambiente mientras se benefician de la destrucción de los bosques. Juntos podemos obligarlos a anteponer la salud del planeta a sus beneficios económicos >>